CASO CECILIA: MARCELA ACUÑA PIDIÓ UNA PELUQUERA PARA LEVANTAR EL ÁNIMO

Los pedidos de Marcela Acuña parecen no tener límite. Y es que ahora la imputada como coautora del femicidio de Cecilia Strzyzowski, solicitó una peluquera para cortarse y teñirse el cabello y así «levantar el ánimo». Cabe mecnionar que primero realizó una huelga de hambre y luego pidió «una sillita plegable, cera depilatoria y un MP3». La petición, que publica hoy Infobae, fue realizada en una carta de puño y letra, con fecha del sábado 22 de julio, y dirigida al titular de la Comisaría 6ª de Resistencia, donde permanece detenida. «Solicito por la presente la posibilidad de ingreso de una peluquera mujer a fin de cortarme y teñirme el cabello, o bien permitirme el teñido, como así también la depilación de rostro», arranca la esposa de Emerenciano Sena y madre de César Sena, también acusados del crimen de la joven de 28 años.

El manuscrito sigue con una serie de condiciones, ya que, además de pedir un cambio de look, Acuña también sugiere en qué momento hacerlo. «Si existe la posibilidad que sea en un día que no corresponda a mis visitas de familiares, ya que cuento con pocas horas para el lazo afectivo. Asimismo, el pedido sería de dos horas, con el día y los requisitos que ustedes dispongan, entendiendo de mi situación de privación de la libertad», escribió. Pero lo más llamativo es, sin dudas, la justificación que dio. «El pedido radica más que en una situación de belleza, en la posibilidad de levantar el ánimo por la situación que estoy atravesando. Igualmente, ofrezco en la misma instancia peluqueros masculinos para cortar el cabello a los detenidos varones de esta comisaría. Agradecida por su permanente predisposición. Marcela Verónica Acuña».

En tanto, el domingo 23 de julio, la líder de Mujeres al Frente, volvió a escribir otra carta al titular de la Comisaría 6ª de Resistencia. A diferencia de la anterior, la redactó en una hoja lisa donde realizó un punteo de cuatro ítems con pedidos vinculados a pedidos ya realizados sobre los que no obtuvo la respuesta deseada. «En primer lugar, quiero saber bajo qué órdenes políticas se me priva del uso del MP3 que me han acercado con mucho esfuerzo familiares, y que ya hay o había autorización previa de la Fiscalía 4″, empezó. Luego cuestionó los días y la duración de las visitas y se comparó con el resto de los reclusos. «Sigo con los días miércoles, sábados y domingos, solo una hora, mientras que para los demás internos es diferente», sostuvo.

Además, se quejó porque no la dejan dejar usar el teléfono celular y hacer una llamada al día. «¿Las privaciones generales y todas las demás represiones diferenciales corresponden a la Fiscalía N° 4 o forman parte de una decisión hacia mi persona por motivos que desconozco?», increpó. Finalmente, lamentó acerca de un «petitorio cerrado» que correspondía llevar a algún familiar, pero que no fue entregado. «Es una pena que se nos haya privado del mismo», aseguró. Y cerró: «Si puede por favor responderme a fin de tomar las acciones legales correspondientes ya que considero que tengo los mismos derechos que otros detenidos que, al parecer, no están privados como yo del uso de MP3, visitas, celular, como otras privaciones que fiscalía sí queda en contestar y que radican en mi derecho como madre de saber y ver el estado de salud de mi hijo y de mi marido. Esperando una respuesta a la brevedad de los puntos 1,2,3,4… Atentamente».